Algo apareció en mis pupilas,
una luz brillante encantadora,
diosa del sol y de la luna,
destellos que alumbran su figura;
Cortinas que se abren amaneciendo,
con el placer de sentirse seguro,
tras la protección de una mirada,
esa luz que ilumina el futuro,
Es la gota que acaricia mis ojos,
es la lluvia que me moja y me baña,
una luz que me lleva a la cama,
y en el sueño suspira que me extraña,
Luz de mis ojos que revela una angustia,
desesperante situación de no encontrarte,
al despertar con las ansias de besarte,
contraponiendo el deseo sofocante,
absorber esa fragancia con locura,
y no llegar a trastocar ese concepto,
dame esa luz traducida en ternura,
una droga que me roba todo el aliento,
No te pierdas ni un momento,
sigue brillando a cada minuto,
es el clamor de mis inundados ojos,
que lloran ilusionados de verte,
al abrir las cortinas,
y con la esperanza de tenerte.
