* Se esperaba más del BI-CENTENARIO
Quedan ya, escasos unos días para que el 2010 fenezca y darle paso un nuevo año lleno de expectativas en todos los ámbitos que rodean al ser humano.
Un 2010 marcado como histórico para la vida política del estado de Oaxaca y de algunos municipios de la región del istmo.
Un 2010 que deja grandes sinsabores, pero también de enormes gratitudes, los cuales habría que aprovechar para ir mejorando cada día.
Políticamente hablando, la transición dado a principios de este mes, dio el indicativo que el famoso “si se puede” se logra alcanzar a base de trabajo, dedicación y voluntad de hacer bien las cosas, cuando verdaderamente se tiene esa vocación de hacerlo y cuando esto existe, los demás entienden fácilmente el mensaje enviado.
Se prevé entonces, que este nuevo orden de gobierno estatal, marque el precedente para un verdadero cambio en el quehacer de la política, puesto que durante ocho décadas, las mafias de la corrupción lograron introducirse en los círculos del poder que impedían que la maquinaria lograra avanzar hacia nuevos rumbos; por eso, Oaxaca es uno de los estados del sur con mayor índice de marginación y pobreza y uno de los estados con posibilidades menores de encontrar un buen empleo a falta de políticas que detonen este sector y que decir de los miles de braceros que se van a probar suerte al vecino país del norte, con la incertidumbre de no volver jamás a la tierra que los vio nacer.
2010, como casi todos los años anteriores, es la misma panacea política y social que irrumpe cada pedazo de las comunidades, con la diferencia de que en este año, dio comienzo un nuevo ciclo que motivo a seguir creyendo que al final del camino, existe esa luz que nos guiara al futuro anhelado.
Así mismo, el 2010, viene a resumir los ”trabajos” realizados en los distintos municipios de la entidad, al menos en lo que va de este trienio, varias poblaciones han dado muestra que continúan en las mismas condiciones que en el pasado, comunidades que siguen esperando esa transformación prometida en campaña y que a tres años de distancia, el 2010, les ha vuelto a una realidad que desafortunadamente, es casi siempre lo miso.
Alcaldes que de la noche a la mañana se convierten en los nuevos caciques de lo pueblos, desvío injustificado de recursos públicos, utilización discrecional de los programas de gobierno, abandono total a la sociedad, obras hechas a la sombra de compadrazgos y amigos, acciones tardías en los casos de emergencia por inundaciones, el ocultamiento de recursos provenientes de servicios propios de los municipios y de terceras personas, en fin, una serie de conceptos que se denuncian a cada rato en los rincones de las colectividades y en los medios de comunicación y que ponen en tela de juicio, la actuación de las autoridades que están ya por dejar el poder que ostentan, volviéndose comunes a los demás, pero con la oportunidad yéndose de las manos de haber sido en su momento el que la historia reconocería como el mejor de los lideres que construyo y sentó las bases en los anales de la historia.
Sin embargo, muchos se irán sin pena ni gloria, muchos serán repudiados por el resto de sus días, otros serán recordados por sus malas acciones y otros tantos por el interés que los movió a consolidarse como un buen dirigente.
2010, ha servido en muchos de los casos, para aprender la lección, en lo político y en lo social, en lo humano y en lo familiar
Para que en el 2011 no volvamos a cometer los mismos errores, ni prescindir de las mismas prácticas del pasado y hacer conciencia antes que todo, de las decisiones a tomar en los vaivenes de la vida y en los asuntos públicos venideros.
De nosotros depende continuar en las mismas condiciones o de plano, abordar el gran velero que ha emprendido su navío en este 2010.
Porque hay cosas que simplemente no pueden esperar…..
Feliz navidad y Prospero 2011
Al tiempo.
Enciende tu conciencia y apaga tu apatía.
