viernes, 19 de marzo de 2010

EL SENTIDO DE LAS ALIANZAS

Se dice que en política todo se vale, supongo que este adagio bien pudiera definir el enorme abismo que día con día va apartando a la clase política de la ciudadanía.
Sin importar ideologías, mucho menos practicas y modelos políticos que históricamente han identificado el proceder de estas instituciones políticas, las famosas alianzas han venido a causar un desbarajuste en estos esquemas, importando solo la ambición del poder por el poder.
¿Donde está entonces el beneficio de estas llamadas alianzas o coaliciones entre partidos?
Tiene usted toda la razón; en ninguna parte, porque los únicos beneficiados son aquellos partidos que no tienen la capacidad electoral de poder alcanzar los puntos porcentuales previstos por la ley para retener su registro, es aquí donde radica el único beneficio; los enormes negocios que llegan a resultar estas empresas políticas a servido a tantos y tantos políticos para “vivir mejor”, lo de menos es que en algunas comunidades del país, literalmente la gente se esté muriendo de hambre.
Otra de las cuestiones de lo estéril que resulta este tipo de uniones y al decir lo siguiente, hago referencia de todos los partidos en general, sin excluir a ninguno; es precisamente en la falta de capacidad para alcanzar acuerdos y lograr que estas alianzas se enfoquen a cubrir y resolver las enormes necesidades que aquejan a las colectividades y justamente usted me dará la razón poniendo como ejemplo lo que en la actualidad vivimos en el estado, es decir, en la mayoría de los municipios donde existe estas alianzas del PRI-VERDE Y PRD-PAN-PC-PT; lo único que sobresale es, el gran bache que representa la desunión entre los partidos coaligados.
Y es que, todos se sienten con derecho de ser ungido por el supuesto trabajo político realizado, dejando entrever la verdadera razón de sus pretensiones.
Aunque en el seno estatal de los partidos se diga lo contrario, la realidad es que estas famosas y bien “negociadas” alianzas, no hacen honor al termino, sino todo lo contrario, porque al menos en esta tierra unidalguense, así nos lo han hecho saber con las primeras acciones emprendidas; ¿que nos espera entonces?, ya que el momento decisivo municipalmente hablando, todavía no llega.
Es así como podemos concluir, que estas alianzas tanto de unos como de otros, simplemente no tiene sentido ni razón de ser, puesto que solo se pretende beneficiar y cobijar a los partidos de poca envergadura en el estado y desde luego, beneficiar a los más cercanos seguidores de cada dirigencia partidista.
Y en todo esta dinámica de las mal llamadas alianzas, de lo último que se habla es precisamente de cómo sacar a las comunidades del atolladero en que se encuentran, los discursos son las mismas de hace seis años, no hay nada nuevo en ellos, las descalificaciones están en primera plana y de las propuestas ni proyectos de estado, nadie se acuerda.
Lo que más importa es sacar al PRI y con todas sus décadas en el poder del gobierno, luego a ver qué pasa, aun a sabiendas que todos son iguales y que se cuecen con el mismo aceite de siempre; la demagogia.
Hace falta en verdad hablar de temas que aquejan a la ciudadanía, inseguridad, pobreza, falta de empleos, oportunidades de desarrollo y tantas cosas más, de esto es lo que hay que hablar en las campañas y dejar de utilizar la vieja práctica de la política emanada de la descalificación.
Qué sentido tienen entonces las llamadas alianzas entre partidos políticos, absolutamente, dicho sentido se perdió desde el momento en que los mismos políticos abalaron estas nefastas unificaciones dando cabida a que en lo sucesivo aparezcan en el escenario, mas y mas partidos políticos sangrando con esto, los impuestos que pagamos nosotros los jodidos contribuyentes.
Al tiempo.